Las bolsas de polietileno termoencogibles han surgido como una innovación versátil y muy útil en el área de los embalajes y, si bien son muy conocidas en la industria, puede que la mayoría de nosotros desconozca qué son, cómo funcionan y por qué han ganado popularidad en varias industrias.
En este artículo exploramos el mundo de las bolsas de polietileno termoencogibles para responder a tus dudas.
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Toggle¿Qué características tienen las bolsas de polietileno termoencogibles?
Primero debemos descifrar el componente estrella: el polietileno, un polímero, es decir un tipo de plástico, que se distingue por ser el más sencillo en cuanto a su composición química. Al ser fácil de producir, tiene la ventaja de ser barato, motivo por el cuál su uso se ha extendido en el último siglo.
No obstante las bolsas termoencogibles no son iguales a las bolsas de polietileno que encontramos en los supermercados, algunas de sus características distintivas son:
1.- Varias capas de polietileno
Las bolsas termoencogibles están elaboradas con varias capas de polietileno de baja densidad, a diferencia de las bolsas sencillas que solo tienen una capa. El uso del polietileno de baja densidad permite que estas bolsas sean transparentes, una característica deseable en el embalaje de alimentos.
2.- Sensibilidad al calor
Se dice que el polietileno termoencogible es sensible al calor, pues cuando se expone a temperaturas elevadas bajo ciertas condiciones, experimenta un cambio molecular lo que resulta en una contracción considerable. La contracción de las moléculas, además, proporciona a este tipo de plástico más dureza y resistencia.
3.- Conformabilidad
Su característica principal es la capacidad de adaptar su forma alrededor de objetos con formas irregulares o complicadas. Esto garantiza a su vez un cierre hermético así como la reducción considerable del espacio en el embalaje.
Es importante añadir que lo deseable es que las bolsas termoencogibles para uso alimenticio estén elaboradas con polietileno y no con PVDC (cloruro de polivinilideno) pues aunque este es un derivado del polietileno, puede despedir cloro directo en los alimentos. Es por ello que se prefiere usar plásticos de baja densidad en varias capas que sean reactivos, pero resistentes al calor.
No obstante, hay que mencionar que las características de las bolsas dependen también del tipo de bolsas, igualmente, el uso que se le da será diferente para cada. De forma tal que es muy importante escoger la bolsa correcta, con el tamaño y grosor adecuados, pero también es importante considerar el correcto acondicionamiento de los productos a embalar.
¿Cómo funcionan?
El proceso de termoencogimiento de estas bolsas tiene un resultado semejante al de las bolsas al vacio, sin embargo, su funcionamiento es diferente. Si bien en ambos casos el producto se introduce a la bolsa en las mejores condiciones de higiene, con las bolsas termoencogibles hay dos opciones para sellar herméticamente el producto, estas son:
1.- Túnel de calor
El túnel de calor es una cámara donde se generan temperaturas controladas, equipada con rodillos para el desplazamiento del producto, no está en condiciones de vacío, solo una cortinilla separa el interior para mantener la temperatura interna.
Para bolsas polietileno los túneles de calor deben producir una temperatura media de 80º celsius, y el movimiento de los rodillos debe asegurar un periodo de, por lo menos, dos segundos dentro para que el plástico adopte la forma del producto.
2.- Pistolas de calor
Las pistolas de calor que se emplean para la retracción del plástico si bien son de uso industrial, también pueden usarse a pequeña escala. A diferencia del túnel de calor, estas no están sujetas a una línea de producción.
Estas pistolas pueden alcanzar hasta los 600º celsius y funcionan con ventiladores, lo que permite ajustar la temperatura según el caso. No obstante, al usar pistolas de calor para bolsas termoencogibles, hay que ser cuidadoso con el direccionamiento del calor para obtener una contracción prolija alrededor del producto.
¿Cuáles son sus ventajas?
Las bolsas de polietileno termoencogibles tienen aplicaciones versátiles, desde la industria alimentaria hasta la farmacéutica, gracias a sus ventajas entre las cuales destacan las siguientes:
1.- Hermeticidad
Cuando las bolsas se contraen alrededor del producto, logrando un ajuste preciso y un embalaje seguro, crean una barrera con el exterior que si se hace en las condiciones óptimas, garantiza un producto libre de crecimiento bacteriano.
De la misma forma, la hermeticidad que ofrecen protege los productos farmacéuticos de la humedad y la contaminación, manteniendo su integridad y calidad.
2.- Ahorro de espacio
A diferencia de las cajas u otros contenedores, las bolsas termoencogibles permiten almacenar los productos con sus medidas reales al ajustarse a su superficie como una segunda piel. De esta forma se ahorra espacio y por lo tanto recursos en su transporte y almacenaje.
Además garantiza una presentación atractiva en los estantes de los supermercados, sobre todo en el embalaje de alimentos pues así el consumidor puede evaluar la calidad del producto por su apariencia.
3.- Resistencia
Las bolsas termoencogibles son conocidas por su resistencia a la perforación y manipulación brusca, lo que las convierte en una elección popular para productos diversos.
Esta cualidad hace que sean las preferidas para el embalaje de productos electrónicos, donde se utilizan para empaquetar componentes delicados, aún cuando estos puedan tener puntas afiladas.
Las bolsas de polietileno termoencogibles representan una innovación significativa en el ámbito del embalaje, no obstante, la investigación alrededor de esta tecnología continúa y se acerca cada vez más a opciones sustentables como las bolsas termoencogibles reciclables o biodegradables. Por esa razón es importante mantenerse informado, ahora que ya sabes qué son estas bolsas, no olvides seguir en contacto con nuestro blog.