Las bolsas de polietileno hoy en día son de gran importancia en la distribución y comercialización de muchos productos. Propiedades como la resistencia a las temperaturas extremas, la impermeabilidad, así como su precio accesible las hacen la mejor opción para embalajes.
No obstante, acondicionar productos dentro de bolsas de polietileno de manera adecuada es importante para garantizar su protección durante el almacenamiento, transporte y manejo.
Por ello, el equipo de Videci ha preparado este artículo para compartirte nuestras recomendaciones para asegurar la calidad de tus productos en el embalaje con bolsas de polietileno.
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ToggleAntes del embalaje
Incluso antes de embalar tus productos hay algunos aspectos que debes tomar en cuenta para optimizar su acondicionamiento, estos son:
Tipo de bolsa de polietileno
La primera consideración al acondicionar productos en bolsas de polietileno es la selección del tipo y grosor adecuados. Es esencial elegir el grosor correcto según la naturaleza y el peso de los productos. Por esa razón revisaremos cuáles son los tipos de bolsas de polietileno, entre ellas están:
- Bolsas de alta densidad: por su estructura molecular son más gruesas y resistentes, menos flexibles y poco transparentes. Por esa razón se utilizan en embalajes que requieren mayor protección.
- Bolsas de baja densidad: al ser menos densas, se pueden estirar sin romperse, son flexibles y transparentes. Son más comunes para embalar productos en los supermercados.
- Bolsas de grado alimenticio: como su nombre lo dice, están elaboradas de forma que su composición no afecte las propiedades de los alimentos, al mismo tiempo que impiden la contaminación por factores externos.
- Bolsas al vacío: las bolsas al vacío que pueden ser de grado alimenticio, tienen mecanismos de cerrado hermético y son transparentes, además, son resistentes a la congelación.
Tamaño de la bolsa
Antes del embalaje, debes considerar también la medida de los productos a almacenar. Hay que asegurar que haya suficiente espacio para el contenido, permitiendo un cierre efectivo de la bolsa de plastico. Un ajuste adecuado no solo garantiza la seguridad de los productos sino que también facilita la manipulación y el almacenamiento eficientes.
Limpieza y preparación
La limpieza es esencial para garantizar la calidad y presentación de tus productos dentro de las bolsas de polietileno, pues la presencia de suciedad o humedad pueden dañar severamente el contenido de las bolsas. Por su parte, el proceso de limpieza varía según el producto, aquí te dejamos algunos consejos:
- Productos alimenticios: Parte de la inocuidad está en el cuidado durante la elaboración de los alimentos, pero también en su empaque. Considera un ambiente fresco y seco para los alimentos no perecederos y la refrigeración para aquellos que puedan desarrollar crecimiento microbiano.
- Productos no alimenticios: para productos de plástico, metal o semejantes, asegúrate de desinfectar las superficies con toallitas o aerosoles. Es importante que retires las posibles acumulaciones de polvo antes de almacenarlos para evitar olores así como deterioro dentro de las bolsas de plastico. Esto aplica también con telas.
En lo que respecta a la limpieza de las bolsas, asegúrate de que tu proveedor trabaje bajo condiciones que garanticen la higiene de tus bolsas.
Durante el embalaje
Existen varias innovaciones en el embalaje al vacío como con bolsas de polietileno, por lo que al introducir el contenido debes considerar lo siguiente:
Organización del contenido
De haber elegido un tamaño correcto de bolsas sobre para tus productos, la organización dentro de las bolsas será más sencillo. Este aspecto más que estético es clave para la manipulación eficiente y el fácil acceso al contenido de las bolsas.
Si vas a embalar un solo producto, procura que éste pueda salir y entrar fácilmente de la bolsa polietileno sin necesidad de manipular o dañar demasiado el embalaje. En el caso de tener más de un producto dentro de la bolsa, deberás considerar las medidas de los objetos más grandes para que el resto se adapten al tamaño de la bolsa. Utiliza bolsas separadas para diferentes categorías o lotes de productos.
Cierre o sellado de la bolsa
Una vez más, de acuerdo a las necesidades del contenido y al tipo de bolsa, puedes elegir de entre alguna de las siguientes opciones para asegurar los productos dentro de las bolsas:
- Bolsas autoadhesivas: son aquellas que ya cuentan con un sistema de cerrado por medio de un adhesivo en alguno de los extremos, de la misma forma puedes optar por cintas adhesivas para un cierre seguro. Aunque en ambos casos no se trata de un sellado sino de un cierre, son útiles para mantener aislados los productos.
- Bolsas de sellado al vacío: en este caso se hace uso de selladoras térmicas las cuales aplican calor y presión a la bolsa en la zona de sellado. Este proceso funde los bordes de la bolsa, creando un sellado hermético que impide la entrada de aire y la salida de líquidos.
Protección para contenidos frágiles
Aunque la elección correcta de la bolsa así como la organización eficiente del contenido pueden garantizar la seguridad del producto, considera usar almohadillas u otro material de relleno dentro de las bolsas si el contenido es frágil o susceptible a daños durante el transporte.
Después del embalaje
Una vez que los productos están dentro de la bolsa puedes considerar pegar o incluir etiquetas dentro de las bolsas, esto proporciona información esencial sobre los productos. La etiqueta puede contener detalles como el contenido de la bolsa, la cantidad de productos, la fecha de caducidad y cualquier instrucción de manejo o almacenamiento.
Después de estos consejos estás listo para utilizar al máximo tus bolsas de polietileno, recuerda que todo lo anterior aplica tanto en el ámbito comercial como en el doméstico. Por esa razón, no olvides continuar al tanto de los mejores tips con los artículos de nuestro blog, ¡hasta la próxima!